
Los aztecas se referían al chocolate como “el alimento de los
dioses”, y los mayas lo utilizaban hasta en los rituales más sagrados. El
cronista de la Nueva España ,
Bernal Díaz del Castillo relataba que el emperador azteca Moctezuma utilizaba
el chocolate antes de satisfacerse con las mujeres, sin embargo el chocolate de
Moctezuma llevaba miel y elementos como vainilla y pimienta para mejorarle el
sabor amargo.

Un estudio realizado por el Ospidale San Raffaelle de Milano
sobre chocolate y sexo, publicado en mayo de 2006 en The Jounal of Sexual
Medicine demostró que el chocolate puede potenciar las relaciones sexuales, al
menos en al caso de las mujeres (se trabajó con 163 mujeres), y las que comían
chocolate tenían niveles más altos de deseo, excitación sexual, también arrojó
que beneficia a las mujeres que tienen bajo libido durante el período
premenstrual.
Lo que no cabe duda es que el chocolate tiene la capacidad
de estimular el sentido del olfato, del gusto y hasta de la vista y el tacto y
utilizado por la persona adecuada, en el sitio apropiado y el momento correcto
puede desatar pasiones y erotizar aún más el momento íntimo.
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